Fuente de la imagen: Tumisu en pixabay |
(mvc, Málaga, España) Cambiaba impresiones con el amigo acerca del feo uso en Internet, por parte de determinados individuos o perfiles virtuales, de apropiación de ideas ajenas. Al abrigo de la práctica de networking y otras estrategias, estos personajes, que se creen los fundadores de las redes sociales, por haber platicado en dos comunidades virtuales, despliegan una conducta premeditada, encaminada a atribuirse los pensamientos, las sugestiones empresariales o cualquier tipo de ingenio engendrado por terceras personas, para luego exponerlas a bombo y platillo en foros, blogs, prensa, conferencias, seminarios, cursos y otros escenarios virtuales y reales, como si fueran propias. ¿Qué cuesta referenciar una foto, una idea, una noticia, un pensamiento? Para algunos, mucho. Pensamos definir este tipo de conducta no ética y después de darle vueltas le asignamos “Ladrones de Networking”. También se nos ocurrió la palabra "cuatreros".
Recibí un e.mail del amigo con link al post que Félix Socorro publicaba en noviembre de 2004, en degerencia.com, “El Síndrome de Anát: Ganar prestigio con ideas ajenas”, con una posdata: “No te comas el coco, el nombre-diagnóstico, ya existía”. Termina Félix el post con la siguiente reflexión: “Se puede decir que la conducta orientada a ganar prestigio con ideas ajenas, en cualquier cargo o nivel de conocimiento que se presente, es una enfermedad organizacional que debe ser identificada, combatida y erradicada en cualquier área o empresa donde se encuentre”. No te extrañe que dentro de unos días, o incluso horas, escuches o leas a tal o cual exasperado energúmeno, en determinado foro, prensa, curso o conferencia, ya sea real o virtual, hacer suyos los conceptos e ideas de Félix o las aportaciones que hoy hacemos aquí. Fuente de la imagen: Tumisu en pixabay.